REQUENA, ANA
Un libro que analiza nuevas formas de estigmatización de unas mujeres que han decidido reclamar lo que necesitan. Por la autora de Feminismo vibrante. Algo (malo) pasa cuando nos llaman intensas o cuando nos sentimos como tales. Especialmente cuando nos lo dicen hombres, especialmente cuando tantas mujeres relatan malestar al ser interpeladas con esa palabra. Es un malestar difuso pero al mismo tiempo muy asociado a acciones como pedir, señalar, enfadarse, quejarse, mostrar emociones, sentir, poner límites. Parece pertinente preguntarse si detrás de esa palabra algo escurridiza no tiene a priori ninguna connotación negativa se ha construido un relato que sirve para hacernos sentir mal, para cuestionarnos. El 'intensa' nos muestra amablemente dónde están los límites y qué sucede si los cruzas. Nuestra mística de la feminidad no tiene que ver con la careta de felices amas de casa, pero sí con la pelea por nuestra identidad: no queremos ser para otros, queremos reconquistar lo que se nos dijo que debíamos ser. No queremos que nos digan cómo debemos sentir, queremos poder vivir lo que sentimos. No queremos quitarle importancia a lo que nos pasa, queremos que lo que nos pasa tenga el lugar que merece. No queremos sonreír para adornar la vida de los demás, queremos adornar la nuestra y guardarnos las sonrisas para cuando nos apetezca. No queremos sentirnos señaladas por quejarnos o pedir, queremos que la queja y la demanda sean señales que atender. La insatisfacción, el abatimiento y el malestar intangible con el que convivimos son producto de una sociedad que nos lo sigue poniendo muy difícil y para la que, curiosamente, las difíciles somos siempre nosotras. ¿Hemos renunciado nosotras a sentir? ¿Nos han convencido de que estamos pidiendo demasiado? ¿Nos han hecho creer que tenemos que renunciar a nosotras mismas para poder encajar? ¿Renunciamos en ocasiones como estrategia de supervivencia?, ¿Es el malestar que sentimos de fondo el resultado de inhibirnos, el fruto podrido- de la incomprensión que recibimos? ¿Puede ser la intensidad una estrategia feminista en lugar de algo de lo que avergonzarnos?La crítica ha dicho...
«Un libro que analiza nuevas formas de estigmatización de unas mujeres que han decidido reclamar lo que necesitan.»
elDiario.es «Intensas de Ana Requena es uno de esos libros que los hombres deberíamos leer para entender por qué tantas mujeres están tan hartas y de qué manera tendríamos que ponernoslas pilas para construir otra manera de ser y de relacionarnos.»
Octavio Salazar, catedrático de Derecho Constitucional «Un análisis genial respecto a esto de ser intensas, desatadas y muy certeras en el amor.»
Deforme Semanal «Llamarnos intensas tiene mucho que ver con la necesidad de limitar y someter a las mujeres.»
Entrevista a Ana Requena en Canal Sur Radio